El running como deporte no está exento de lesiones y entre las más comunes a las que podrás enfrentarte si decides practicar este deporte, ya seas un corredor experimentado o principiante, se encuentran las siguientes:
1️⃣ Fascitis Plantar: Esa molestia en la planta del pie puede ser señal de esta inflamación. Unas zapatillas de running adecuadas y los ejercicios de estiramientos son clave para prevenirla.
2️⃣ Uñas Negras: ¡No subestimes el poder de unas zapatillas bien ajustadas! Las uñas negras son más comunes de lo que crees debido al exceso de presión de la zapatilla o los microtraumatismos repetidos sobre la uña.
3️⃣ Tendinitis: Si sientes dolor en la parte posterior del tobillo, podrías estar enfrentándote a una tendinítis por lo que no debes realizar esfuerzos que produzcan o agraven esta lesión.
4️⃣ Esguince de Tobillo: Es sin duda una de las lesiones del pie más frecuentes en el corredor. Un mal paso, correr sobre una superficie inestable o resbaladiza o las zapatillas que no sujeten adecuadamente el tobillo incrementará el peligro de torcerse el tobillo. Fortalece tus tobillos y practica ejercicios de equilibrio para prevenirlo.
5️⃣ Fracturas por Estrés: El desgaste constante puede conducir a fracturas por estrés. Varía tu rutina, descansa y escucha las señales de tu cuerpo.
6️⃣ Tendinopatía o Rotura del Tendón de Aquiles: Un recordatorio de que este tendón resistente puede verse afectado llegando incluso a poder producirse su rotura de una forma súbita y sin antecedente previo. Estirar adecuadamente y fortalecer los músculos del gemelo es esencial para evitarlo.
7️⃣ Síndrome de la Cinta Iliotibial: Rodillas resentidas pueden ser señal de este síndrome. Este dolor suele aparecer durante la carrera y empeora de forma gradual hasta obligar a detenerse al corredor. Aunque la molestia puede desaparecer tras un período de descanso a menudo aparece de nuevo cuando la carrera se reanuda. Fortalecer y estirar es esencial para prevenirlo.
La forma de entrenar, una mala técnica, la falta de entrenamiento, escaso calentamiento y estiramiento de los músculos así como el uso de determinadas zapatillas pueden influir en el desarrollo de estas lesiones.
Aquí te dejamos algunos consejos para prevenir lesiones, complicaciones y poder seguir disfrutando del running:
1. Calzado Adecuado: ¡No escatimes en zapatillas! Asegúrate de que las zapatillas que utilices sean adecuadas para tu tipo de pie, al estilo de tu carrera y se ajusten correctamente a tu pie. Deberás reemplazarlas cuando estén desgastadas de tal forma que se mantenga el soporte y la amortiguación. Aquí podrás comprar con un solo click la que se adapte a tus necesidades https://amzn.to/49wZz8g
2. Estiramiento y Calentamiento: Antes de correr, dedica tiempo a estirar y calentar tus músculos. Esto ayuda a preparar tu cuerpo para la actividad.
3. Fortalecimiento Muscular: Incorpora ejercicios de fortalecimiento en tu rutina, especialmente aquellos que se centren en los músculos de las piernas y los pies.
4. Variación en Superficies: Evita correr siempre en la misma superficie. Alternar entre asfalto, tierra y superficies más suaves puede reducir el impacto repetitivo.
5. Escucha a tu Cuerpo: Si sientes dolor o molestias persistentes, no ignores las señales. Descansa cuando sea necesario y busca asesoramiento profesional si es necesario.
6. Progresión Gradual: Aumenta la distancia y la intensidad de tus carreras gradualmente. Evita cambios bruscos que puedan sobrecargar tus músculos y articulaciones.
7. Hidratación y Nutrición: Mantente bien hidratado y asegúrate de obtener los nutrientes necesarios para el rendimiento y la recuperación.
8. Rehabilitación Activa: Si has tenido lesiones previas, incorpora ejercicios de rehabilitación en tu rutina para fortalecer áreas vulnerables.
9. Descanso Adecuado: El descanso es fundamental para la recuperación. Asegúrate de tener días de descanso en tu rutina para permitir que tu cuerpo se recupere.
10. Análisis de Pisada: Un podólogo puede realizar un análisis de tu pisada y recomendarte un calzado adecuado o plantillas personalizadas que puedan corregir problemas biomecánicos evitando lesiones.
Recuerda, cada corredor es único, así que adapta estos consejos según tus necesidades individuales.
¡A correr feliz y saludablemente! 🏃♂️💙